Tema
Judd Winnick, reputado guionista de cÓmics, participó al inicio de su carrera en un reality de MTV llamado The Real World. Allí conoció y convivió con Pedro Zamora, un chico cubano seropositivo y que dedicaba todo su tiempo a dar charlas sobre el SIDA por todo EE.UU. Estamos a principio de los 90, y el VIH y el SIDA siguen siendo fuente de múltiples mitos y falsas creencias. Winnick cuenta la experiencia desde su punto de vista, cómo le sensibilizó con el tema y cómo se dejó arrollar por la personalidad de un hombre con un carisma extraordinario.
Puntos fuertes
A pesar de que Winnick es mundialmente conocido por sus guiones en cómics de superhéroes, sus inicios fueron como humorista gráfico con tiras de prensa. Eso se nota en el dibujo, con un toque cartoon y con un protagonismo absoluto de las cabezas, y los rostros. Aunque no están desproporcionados, tienen un aire a tira de prensa que es inevitable.
No es el estilo que busca. De hecho, arriesga en algunas páginas con herramientas que consiguen transmitir muchísimo, como el hecho de saturar la página con pequeñas viñetas para mostrar el agobio de Pedro cuando se entera que es seropositivo y mostrar esa impotencia en la soledad de un viaje en coche; o esas preciosas páginas finales con el destino de Pedro en las que las páginas incluyen pequeñas viñetas con grandes vacíos que representan la tristeza y el hueco que deja en el corazón de sus amigos y familia.
Es una obra con un toque divertido, no dramatiza, lo cuenta con naturalidad, y aprovecha el tema del reality para introducir la información sobre la evolución de la enfermedad y sobre todo de cómo una persona ajena a la sanidad y sin muchos conocimientos sobre la enfermedad descubre que convivir con un seropositivo, no tiene por qué entrañar ningún peligro.
El libro consigue momentos de ternura muy intensos y el desenlace, presumiblemente fatal, es contado con una sensibilidad que hace muy difícil contener las lágrimas. No obstante, no opta por la lágrima fácil ni te deja el ánimo por los suelos. El autor acaba con un mensaje optimista y de animar a conocer la enfermedad antes de estigmatizar a sus pacientes.
Aborda muy bien el proceso de duelo, la fatiga psicológica del paciente y su entorno ante un desenlace fatal conocido y esperado.
Por qué es medicina gráfica
Pedro y yo es Medicina Gráfica porque habla sobre la vida diaria de un seropositivo. Nos permite acompañar a alguien que ha dedicado sus últimos años de vida a dar charlas sobre la enfermedad allá por donde lo llamaban, y nos deja ver cómo lo hace: Con naturalidad, sin eufemismos, y rompiendo barreras entre la a menudo rígida moral americana.
En los últimos meses de vida, nos muestra todo un catálogo de enfermedades infecciosas que va pasando el protagonista: Desde un herpes zoster, a una neumonía por Pneumocystis carinii, a la leucoencefalopatía multifocal progresiva que acabó con su vida. Explica bien la patogenia de la enfermedad, sin enviar un mensaje farragoso ni excesivamente técnico que permite entenderla a cualquier tipo de lector, sanitario o no.
Puede ser útil para interesados en la enfermedad, así como para docentes o asociaciones de enfermedades, para aprender cómo se deben tratar las charlas para estudiantes o personas no sanitarias, de una manera directa y desenfadada, sin permitir que nada difumine el mensaje.
Premios y enlaces de interés
https://en.wikipedia.org/wiki/Pedro_Zamora
http://astiberri.com/products/pedro-y-yo
http://www.juddspillowfort.com
PREMIOS:
- Mejor libro del año 2000 de Publishers Weekly.
- Nominado al Eisner a la mejor novela gráfica de 2000.
- Seis premios de la American Library Association en 2001.
- Elegido en 2006 como uno de los 15 mejores títulos del año por la ACBD (Association des Critiques et journalistes de Bande Dessinée)
