Para que la oscuridad no nos alcance (El mundo al otro lado de la ventana)

Para que la oscuridad no nos alcance (El mundo al otro lado de la ventana)

Autores/as
Peter David, Gary Frank
Número de páginas
22 (el volumen completo 320)
Fecha de publicación
1994 (original en USA), 2020 (traducido en España)
Editorial
Panini
ISBN
9788413341866

Tema

Este número consta de varias historias paralelas con el VIH como denominador común. Por un lado, Jim Wilson, amigo de aventuras de Hulk (Bruce Banner), y portador del VIH en etapa SIDA, sufre una descompensación de su enfermedad, y pide a su amigo que le ayude con alguna terapia experimental. Del mismo modo, Betty, esposa de Banner, atiende en un servicio de línea directa a un hombre que tras conocer su diagnóstico de VIH desea suicidarse. Por último, a un niño con diagnóstico de VIH se le prohíbe la entrada a su colegio por el miedo de varios padres a que pueda contagiar a sus hijos.

Puntos fuertes

Una de las frases más escuchadas en el mundo del comic es que “son para niños”, “no reflejan el mundo real”. Pues bien, esta obra, que recoge varias historias de distintos personajes, incluye temas relacionados con la salud desde el ámbito de la justicia social (tiroteos en las escuelas), las drogas, alcoholismo, o el SIDA.

De estas historias, aquí nos referimos a la de Hulk, que nos hace reflexionar sobre el SIDA. La elección de este tema por parte de Peter David se asume como un completo acierto, puesto que Hulk es un personaje que conoce el rechazo y la discriminación por ser distinto, y la soledad que esto conlleva. Una de las ideas que ha existido siempre alrededor de Hulk es que él solo quiere que lo quieran y acepten como es, siendo que al contrario, se le rechaza y se le tiene miedo. Vemos muy reflejado este concepto en las primeras páginas del comic cuando el niño protagonista de una de las historias solo quiere volver al colegio y promete portarse bien para que le dejen ir, sin entender bien por qué ocurre todo este alboroto a su alrededor.

Desde el punto de vista formal, desde el principio se ve que es distinto a otros comics más “tradicionales”, la portada es de color negro a excepción de una figura en cama con Hulk a su lado, ambos iluminados parcialmente por una lámpara. Al mismo tiempo, un lazo rojo símbolo del apoyo a los pacientes con VIH y la lucha contra el SIDA ya nos da una idea de por donde van a discurrir las cosas.

Especialmente llamativo resulta el cartel que porta Jim Wilson en las primeras viñetas del comic, “la ignorancia alimenta el miedo”, muy adecuado tanto para el VIH como para el propio personaje de Hulk.

Por otro lado, la relación que se va formando entre Betty y Chet nos deja con el corazón apretado, a medida que se ve avanzando en la historia, y somos testigos de la fe y esperanza de Betty en que lo podrá “salvar”, y la desesperación de ver, al igual que Chet, la luz del tren que se acerca de forma a toda velocidad, haciendo un paralelismo con la proverbial “luz al final el túnel”, para después, la viñeta se va a negro, y el comic llega a su fin, dejándonos a solas con nuestros pensamientos sobre lo que acabamos de vivir.

Por qué es medicina gráfica

Este es otro ejemplo de que los comics no son solo un medio de evasión para el lector, sino por el contrario, un vehículo para “poner sobre el tapete” temas tan difíciles de tratar en su momento como el SIDA (recordemos que esta publicado en 1994 en su versión original), y que lo aborden desde distintos enfoques: la discriminación incluso hacia los niños, que nace del miedo, o el miedo al “qué dirán” que se vislumbra en la historia de la que Betty es testigo. Sin querer caer mucho en spoilers, esta no es una historia con un final feliz (estereotipo propio del comic), lo que también aporta una cuota de realismo y crudeza a un tema como este.

Por otro lado, el comic pasa también de puntillas por otros aspectos: racismo, responsabilidad médica con terapias experimentales o la homofobia.

De este modo, se convierte en una herramienta muy provechosa en términos de educación y por sobre todo, para abrir la conversación acerca de un tema que en algunos contextos y para algunas personas sigue siendo tabú o estigmatizante.

Solamente añadir que este comic fue muy polémico en su momento, y la sección de cartas al editor se llenó de críticas y alabanzas hacia el autor por cómo había retratado a los protagonistas o la dificultad de haber presentado un tema así en tan sólo 22 páginas. Hasta la editora de la serie tuvo que tomar cartas en el asunto.

En fin, un comic muy bien hecho, con la intención no de responder preguntas o resolver dudas, sino de animarnos a hacernos y responder entre nosotros las preguntas que puedan surgir acerca de cómo nos relacionamos con los demás, y cuáles son los motores que gobiernan nuestra manera de relacionarnos con el mundo.

Premios y enlaces de interés

Twitter: @PeterDavid_PAD

PeterDavid.net

ENLACES A NOTICIAS DE INTERÉS

https://www.honcho-sfx.com/blog/the-incredible-hulk-420-a-marvel-milestone-remembered/

https://www.cuartomundo.cl/2018/04/24/el-sida-y-los-comics-parte-1-la-inclusion-como-motor-narrativo/

 

1994 Nominado al Eisner como mejor escritor

1996 Premio Haxtur como «Mejor Guion» en el Salón Internacional del cómic del Principado de Asturias

 

ficha de Para que la oscuridad no nos alcance (El mundo al otro lado de la ventana)