Tema
El autor nos cuenta la historia de su hijito Mallko, un niño que nació con un cromosoma de más, (síndrome de Down) y por el que inicialmente siente rechazo.
Puntos fuertes
Mallko y papá es un precioso y muy peculiar álbum ilustrado que nos trae una historia personal contada desde la honestidad más desnuda. Este es sin duda uno de sus puntos fuertes. Este libro contiene toda la credibilidad de quien habla en primera persona y de quien relata cómo tuvo un hijo al que le costó querer.
Es una tierna historia que se convierte también no solo en una descripción de la vida del niño sino de un homenaje a su madre y a su hermano mayor, ambos aceptaron a Mallko como era: “Su mejor hermanito”.
Mallko y papá está lleno de reflexiones sobre el protagonista, sus necesidades, sus aspiraciones, sus diferencias, sus reacciones, juegos, amigos y afectos. Nos cuenta lo que hace, los paseos, las rutinas, el cole, la medicación, su pasión por el futbol y los coches, su inagotable carrera tras las palomas o la cirugía cardiaca a la que es sometido.
El estilo estético es muy propio y atractivo, con una gran parte en formato collage, usando fotos y dibujos. La mayoría de letra es manuscrita, con papeles de distintos colores, con muchos dibujos de aspecto abocetado, como una oda a la imperfección. Con un aspecto infantil, atrevido, a veces inacabado, se va quedando uno con el mensaje de que lo importante no es el aspecto y que el autor ha disfrutado inmensamente creándolo. Hay una sensación de continuo juego, de disfrute y creatividad. El bolígrafo, la cera, el rotulador y la acuarela, los tachones, los garabatos del propio niño transmiten dulzura y buen humor, características claras del propio Mallko. Rezuma originalidad.
Por qué es medicina gráfica
Gusti, el autor, comienza su relato reconociendo que a veces, con los hijos, pasa como con los dibujos: no salen como te imaginabas. “A un dibujo lo puedes romper y volver a hacerlo, puedes retocarlo, mejorarlo, perfeccionarlo….pero con el hijo de verdad, eso no lo puedes hacer.” Y eso le pasó a él, tuvo un hijo a quien no aceptó pero que con el tiempo no solo aceptó sino que decidió que era lo mejor que le había pasado en la vida.
Este libro no solo visibiliza a las personas con síndrome de Down sino que se centra en dibujar a un niño desde lo que le hace único, feliz, mejor y no desde la discapacidad. Lo plantea inicialmente como un reto y después como un regalo, el de “el amor incondicional”.
Como dice Gusti al final de su obra “Los niños con síndrome de Down están en peligro de extinción”. Este libro puede resultar una herramienta útil para familias que afrontan la llegada de un niño con esta condición, además de mostrar a la sociedad una realidad con frecuencia estigmatizada. Además es una lectura adecuada en el medio educativo para favorecer la inclusión.