Puntos fuertes

Comencemos por lo estético. Cara o Cruz es una novela gráfica que utiliza de manera magistral las posibilidades tan peculiares que ofrece el lenguaje del cómic. Las ilustraciones tienen una fuerza importante que viene dada por el uso del color. Es un libro realizado en tonos de grises y un naranja en varias tonalidades, utilizados para resaltar emociones, estados o simplemente como complemento. El resultado visual es fascinante. Al avanzar la lectura notas como predomina el negro cuando el ánimo es bajo y el naranja cuando es patológicamente alto. El tipo de viñeta es variable y flexible, sin seguir ningún patrón, desde un solo dibujo ocupando toda la página hasta series de viñetas en caja.

Las figuras son muy sencillas y las caras tremendamente expresivas a pesar de que en la mayoría de las imágenes…¡ ni siquiera  tienen nariz!. El movimiento corporal es muy vivo e incluso ignorando el texto, es fácil limitar cuando la protagonista está atravesando una fase de depresión frente a otra de hipomanía.

Lou Lubie se prodiga en metáforas visuales que facilitan la comprensión de sus emociones, «esa cosa negra que succiona su felicidad» aparece con forma de monstruo que invade su mundo. Utiliza también con frecuencia la inmersión en agua profunda, donde al lector parece faltarle la respiración, como alegoría a la angustia más intensa con ideaciones suicidas. La figura de un zorrito acompaña a Lou en toda su historia, este zorro, a veces negro, a veces naranja simboliza su enfermedad.

Esta impactante novela gráfica mezcla la experiencia personal y el relato de su historia con la aportación de información sobre la enfermedad mental. Se detiene en explicar el funcionamiento cerebral de las emociones y el lugar que ocupan las hormonas y los neurotransmisores, así como los tipos de temperamento descritos (hipertímico, melancólico, linfático, irritable,ansioso y ciclotímico). Explica datos estadísticos sobre la bipolaridad y hace un repaso sobre los tipos de enfermedad bipolar y sus tres tipos (tipo I, tipo II y ciclotimia). Dedica espacio a los posibles tratamientos poniendo énfasis en el litio, su efecto beneficioso, sus efectos secundarios, cómo tomarlo, cuidados especiales….etc.

En esta obra, no solo destaca el uso extraordinario de la imagen sino que contiene descripciones de enfermedad mental que por su intensidad, resultan casi poéticas: «La depresión primero devora el cuerpo, luego consume el ánimo y luego, cuando ya no queda nada, contemplamos cómo gira un mundo en el que no tenemos sitio. Todavía presentes pero muertos por dentro, como un fantasma». La frase final en la que la autora parece congraciarse con su enfermedad, es digna de mención: «El día que comprendí que rea ciclotímica…comprendí que me había equivocado. No soy el subidón o el bajón. SOY EL MOVIMIENTO»

Una de las fortalezas de Cara o Cruz es haber recibido el apoyo y supervisión de una psicóloga clínica especializada en bipolaridad Isabelle Leynac-Solignac,  lo cual aporta solidez científica y credibilidad a sus contenidos, más allá del testimonio  personal de la autora. Esta psicóloga hace un llamamiento:  «El trastorno bipolar presenta diferentes formas y la ciclotimia es todavía bastante desconocida, sufriendo en la práctica un lamentable retraso en el diagnóstico» Este es el caso de Lou Lubie a quien tardan ocho largos años en diagnosticar y que va dando tumbos visitando a ocho especialistas diferentes en un camino caótico hasta el diagnóstico y tratamiento.